Hoy he recordado a una maravillosa actriz de cine: Deborah Kerr (30.9.1921-16.10.2007).
Grandísima actriz, protagonista de películas excelentes, he aquí algunas de ellas que bastarán para dar fe de su enorme trayectoria en el cine:
Las minas del Rey Salomón (1950)
De aquí a la eternidad (1953)
Buenos días, tristeza (1958)
Tres vidas errantes (1960)
Los inocentes (1961)
El compromiso (1969)
En los últimos años de su vida estuvo aquejada de un Parkinson.
Y he recordado también, entonces, un poemita que me permití escribir en su homenaje. Tengo el impulso de publicarlo aquí, por primera vez, a sabiendas de que no contiene ni una ínfima parte de la calidad que la estrella se merecía:
DEBORAH KERR
Qué profunda elegancia
más allá del protocolo y las buenas maneras
esa mirada dulce pero cargada de pulsión erótica
¿quién no hubiese hecho guardia
ante tu tienda africana?
¿quién no hubiese querido abrazarte
en la eternidad de aquella playa?
¿quién no hubiese querido ser Miles
para recibir tu beso de institutriz atormentada?
pero ahora no eres tú
no eres nadie
no sabes que eres un ser
que ha perdido el rumbo
en los pasadizos de la memoria
una marioneta sin espíritu y sin hilos
que flota en las aguas abisales
del limbo Parkinson
deambulas por espacios indescifrables para ti
recorres los pasillos y dependencias de una casa
pero no sabes que son dependencias ni pasillos
la casa es un espacio sin tiempo
ni nombre
hay seres que te acompañan y te hablan
pero desconoces el significado de esos sonidos
¿qué es una palabra al borde del abismo?
no entiendes sus gestos
y te estremeces por el extraño contacto
de una mano que esboza una caricia
ves en el espejo tu imagen pero no ves nada
todo está vacío
no hablas y no preguntas
porque no sabes qué decir
ni tiene sentido nada porque
el big bang estalló en tu mente
un mal día o tal vez un día no tan malo
desapareces
sin saber que eres Deborah Kerr
que en un pasado muy remoto
eras o habías sido Deborah Kerr
y ni siquiera sabes que no lo sabes
+.
Anonymous 22:36, noviembre 09, 2013
Gracias, Sr. Gude, por haber tenido el impulso de publicar su poema dedicado a la gran actriz D. Kerr. Es hermoso ese recordatorio sobre el final de una gran actriz. Aunque también podría no haber sido un poema, sino una sentida esquela, no en verso, para la actriz que tanto nos hizo disfrutar con muchas de sus películas. Si, bonitas palabras. Sólo un detalle. Yo no soy médico, pero leyendo el poema me hace pensar que la enfermedad que la llevó al final fue la enfermedad de Alzheimer, no el Parkinson. Claro, que esta gran dama del cine, finalmente, a su edad pudo morir de un conjunto de enfermedades. No es que importe la exactitud de la enfermedad que la sacó del mundo de los vivos, realmente lo que importa es su sentido poema. Pero el Parkinson ataca, principalmente, a los neurotransmisores que dirijen los movimientos. Tal vez, el Alzheimer, considerando la edad de Kerr, llegó a dañarla también.
Antonio Gude 13:53, marzo 21, 2012
José Manuel C. Sí, en realidad, los amores platónicos nunca han significado gran cosa para mí. Cuando era joven DK no me decía mucho. Pero luego empecé a apreciarla: gran actriz, sutil, mujer atractiva, con una mirada realmente inquietante e ininterpretable. Supongon que «a la vejez, viruelas». Saludos.
Anonymous 13:00, marzo 21, 2012
Estimado Antonio. ¡ Cómo te entiendo !
Es mi amor platónico. Ella es la idea de elegancia personificada. ¡Qué estilo, qué aristocrácia en sus maneras, en su mirada!
En fin… veo que a ti pasa lo que a Oscar Wilde: «Mi gusto es de lo más sencillo, a mí solo me gusta lo mejor».
Un saludo.
José Manuel C.
Antonio Gude 14:30, marzo 19, 2012
Gracias por tu comentario, Jairo. Saludos.
Anonymous 13:44, marzo 19, 2012
El poema transfiere una sensibilidad, rayana en la tristeza.Sentido homenaje para una extraordinari actriz que estuvo nominada 6 veces al «Oscar», ganándolo al final por su gran trayectoria.Se retiró en 1969.
Sus fotos se pueden ver en:»Imágenes de Deborah Kerr».
Recuerdo haber visto sus siguientes películas:
1-Prisionero de Zenda, basada en el libro de Anthony Hope, en reparto con Stewart Granger, habitual en varias de sus películas y James Mason.
2-De aquí a la eternidad,del escritor James Jones,en reparto con Burt Lancaste, Frank Sinatra, Montgomery Clift y Ernest Borgnine.
3-Julio Cesar, escrita por W. Shakespeare, en reparto con Marlon Brando.
4-El Rey y Yo,con Yul Brynner.
5-Las minas del Rey Salomon, novela de H. Rider Haggard,con Stewart Granger
6-Quo Vadis, del autor Henry Sienkiewicz, con Robert Taylor y Peter Ustinov como Neron
7-Buenos días tristeza, escrita por Francoise Sagan, dirigida por Otto Preminger, en reparto con David Niven
8-La Noche de la Iguana, de Tennessee Wlliams, dirigida por John Huston, en reparto con Richard Burton y Ava Gardner
Paz en su tumba. Jairo