A comienzos del siglo XIII los emperadores romanos, que debían haber conocido el ajedrez en Europa Occidental, se instalaron en Constantinopla. El resultado puede detectarse en la última referencia al zatrikion en griego bizantino. La historia de Ducas, escrita hacia 1.400 d.C., cerca del final del Imperio Bizantino, contiene una narración de los incidentes que llevaron a nombrar al hijo de Tamerlán, Shahrukh, a partir de un término ajedrecístico.
En determinado pasaje, Ducas añade la información de que los persas llaman al ajedrez zatrikion santratz y los latinos scacum. Más tarde, emplea el término scacum para una pieza de ajedrez, adaptación del latín scacus, pieza de ajedrez, mientras que al juego se le llamaba scacorum ludus.
Hay una rama de la literatura griega tardía, de extensión reducida, que podría contener una referencia anterior a cualquiera de las citadas. Es posible que los matemáticos griegos conociesen el problema matemático del «doblaje de las casillas del tablero», la progresión geométrica protagonista de tantas leyendas árabes, puesto que se encuentra en los más antiguos MSS medievales de Europa sobre matemáticas.
Tras la caída de Constantinopla (1453) y los últimos reductos de la Cristiandad en Asia Menor (1461), desaparecieron los vestigios del Imperio Bizantino y los griegos pasaron a ser un pueblo sometido, que adoptó el lenguaje de sus conquistadores. El juego del zatrikion, cualesquiera que hayan sido sus reglas y popularidad, se hizo obsoleto y su mismo nombre quedó enterrado en el olvido. Si se jugaba entonces algún tipo de ajedrez, debió haber sido el ajedrez turco, el pueblo dominador y una curiosa confirmación, a fines del dominio otomano, puede hallarse en el nombre de una apertura, la Defensa Griega, empleada por Allgaier (1), según la costumbre de los jugadores vieneses, como se conocían los esquemas defensivos con fiancheto, característicos del ajedrez nativo turco.
Olvidado el zatrikion, nada era más natural que asignar un nuevo nombre al shatranj turco. La pobreza del alfabeto griego necesitaba proceder a cambios en esta palabra, como había sucedido con chatrang. Así, dio lugar a la forma santratz (como en el libro de Ducas) o santraz, la forma que según Hyde se usaba entonces. Los diccionarios modernos mencionan santratsi como de uso vulgar, y añaden otra forma, Satrengion, una adaptación moderna del dialecto egipcio del árabe.
El ajedrez turco tuvo en Grecia un destino similar al zatrikion y los griegos modernos se volvieron hacia Occidente para su conocimiento del ajedrez. El nombre del juego, skaki, y su traducción del francés, incluidos los nombres de las piezas, delatan la procedencia del moderno ajedrez griego.
En el único libro griego sobre el juego, Encheiridion Zatrikion, de Leo Olivier (2), la tentativa por revivir la palabra zatrikion debe verse como un deseo de reivindicar las aspiraciones nacionales.
(1) Johann Baptist Allgaier (1763-1823), maestro y autor de ajedrez.
(2) Atenas, 1894.
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