Antonio Gude

El GM Magnus Carlsen, número uno del ranking mundial, ha escrito una carta al presidente de la FIDE, comunicándole su decisión de renunciar a participar en el ciclo de Candidatos al título mundial. Sigue texto de la carta (traducción mía):

Al Presidente de la FIDE, Kirsan Ilyumzhinov
y Comité FIDE para el Campeonato Mundial

Hago referencia al presente ciclo por el Campeonato Mundial.
El propósito de esta carta es informarles de mi decisión de no tomar parte en los proyectados matches de Candidatos, a celebrar entre marzo y mayo de 2011.
Tras haberlo sopesado detenidamente, he llegado a la conclusión de que el ciclo 2008-2012 no representa un sistema lo bastante moderno y justo que me aporte la motivación necesaria para afrontar el largo proceso de preparativos y matches con garantías de exhibir mi mejor nivel.
Los privilegios del vigente campeón, la larga duración del ciclo (5 años), los cambios practicados en el nuevo formato (fase de Candidatos), el hecho de que el Campeón Mundial no necesite jugar desde Kasparov, confusos criterios de ranking, así la incesante modificación de concepto, match tras match, son, en mi opinión, menos que satisfactorios.
Al comunicarles mi decisión con un margen de cuatro meses antes del comienzo de los primeros matches, y antes igualmente de que remitan a los jugadores los correspondientes contratos y regulaciones detalladas, considero que les permitirá buscar un sustituto adecuado.
Aunque con esta carta no pretendo influirles para que introduzcan nuevos cambios en el presente ciclo, me gustaría aprovechar esta oportunidad para someterles algunas ideas acerca de ciclos futuros, además de las ya expuestas durante la conversación telefónica del 27 de diciembre pasado, entre directivos de la FIDE y un grupo de jugadores de elite.
En mi opinión, los privilegios, en general, deberían ser abolidos y el modelo de futuro Campeón del Mundo debería basarse en una lucha justa, es decir, en términos de igualdad, entre los mejores del mundo. Esto debería aplicarse también al vencedor del precedente Campeonato Mundial, sobre todo cuando, en la elite mundial hay varios jugadores de un nivel parecido. (¿Por qué debería tener un jugador una o dos plazas en la final, en detrimento de los demás jugadores del mundo? Imaginemos que el equipo vencedor de la Copa Mundial de fútbol 2010 fuese directamente clasificado para la final de 2014, mientras que todos los demás equipos deben luchar por la otra plaza.)
Una posibilidad, para ciclos futuros, sería organizar un torneo por el Campeonato Mundial para 8-10 jugadores, de forma similar a los eventos de 2005 y 2007.
La propuesta de abolir los privilegios del Campeón Mundial en el futuro no constituyen, en modo alguno, una crítica o un ataque al vigente campeón, Viswanathan Anand, un colega ejemplar y un oponente al que tengo en gran estima.
Tengan la seguridad de que sigo estando motivado para jugar ajedrez de competición. Mi plan actual es seguir participando en torneos de alto nivel y tratar de conservar el número uno de la lista mundial, que he podido defender durante la mayor parte del presente año.
Cordialmente,
GM Magnus Carlsen

El tema que suscita Carlsen parece perfectamente sensato y es recurrente en la historia del Campeonato Mundial de ajedrez: abolir o no los privilegios del campeón. En principio, nos parece justo que así sea, y así se lo ha parecido a todos los aspirantes al título mundial, en distintas épocas y contextos. El problema es que esa lógica se invierte cuando se sientan en el trono. Entonces ya nadie habla de justicia, sino de otra justicia: se esgrimen méritos, se alude a las enormes dificultades y obstáculos que el campeón ha debido superar para conseguir la corona, etc., y más de uno querría inscribir «su» título en el Registro de la Propiedad.
No se entiende bien lo de «una o dos plazas en la final», pero cabe interpretar que la FIDE concede una plaza al vigente campeón y otra al campeón anterior.
También parece claro que Carlsen prefiere la fórmula de torneo a la de match. Bueno, es una opinión perfectamente válida y, desde luego, nada extravagante, puesto que la misma FIDE ha organizado ya torneos de ese tipo en 2005 y 2007.
http://www.chessvibes.com/ ha preguntado al padre y al representante de Magnus Carlsen acerca de posibles razones ocultas y les ha pedido explicaciones adicionales. No vale la pena incluir aquí sus respuestas, porque han sido vagas, confusas y decepcionantes. En otras palabras: no han dicho nada. Si la gente nos entendemos a base de argumentos y razones lógicas, las respuestas de estos señores han sido propias de marcianos y la impresión general (a juzgar por los numerosos comentarios del sitio citado) es que, si el número uno del mundo está asesorado por ellos, está listo.
El 10 de noviembre Georgios Makropoulos, presidente adjunto de la FIDE, ha comunicado a los medios que el sustituto de Carlsen será el GM Alexander Grischuk, que ya ha dado su conformidad.
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