En la introducción a su partida con Gadir Guseinov (match Azerbayán-China de la Olimpiada), el GM Ni Hua, que defendió en Tromso el cuarto tablero de su equipo (con 6,5 de 9), habla de pasada sobre la estrategia de su equipo. Extraemos un fragmento de la misma (New in Chess, 2014/6, pp. 19-22):
«En la Olimpiada, y debido a la excelente actuación que estaban teniendo nuestro segundo y tercer tableros, nuestra estrategia quedó clara: el primero y cuarto tableros deberían jugar con solidez, permitiendo que el segundo y el tercero buscasen rupturas agresivas. (…) Esta partida corresponde al importantísimo match contra Azerbayán en la octava ronda. Ellos cuentan con dos superestrellas en su equipo y aún tenían una tercera, lamentablemente desaparecida. Pero siguen siendo un equipo muy fuerte y un peligroso competidor por la medalla de oro. Recordemos que el año pasado se proclamaron campeones de Europa, de modo que su fuerza es innegable. Hicimos una intensa preparación antes del encuentro, y discutimos mucho la formación de nuestro equipo. En el cuarto tablero, yo debía jugar contra Guseinov, y también debatimos considerablemente el sistema de apertura, decidiendo de forma unánime que yo debería eludir una lucha teórica en la Najdorf. Por el contrario, decidí plantear algo inesperado…»
La partida fue una Caro-Kann (B19), en la que Ni Hua se impuso en 55 jugadas.
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