Me refiero a declaraciones o actos al margen del tablero, aun cuando las acciones en éste estuviesen implícitas en aquéllos.
Me hubiese gustado titular a esta entrada LAS MAYORES PARIDAS etc., pero supongo que los políticamente correctos no lo aprobarían o que incluso me llevarían directamente a la hoguera.
En este ranking los disparates se relacionan por rango de menor a mayor importancia, a criterio del escribidor.
1
Entrar en la locura, no salir de ella y añadirle una «e» a tu apellido (Planinc, extraordinario jugador, reconvertido en Planinec). Sé que es cruel decirlo, pero su decisión parece ridícula, cuando está en juego la existencia. Y además es imperdonable que, durante años, nos hiciese perder su rastro a sus muchos admiradores.
2
El GM Jan Hein Donner, en su gran libro EL REY, escribió que al entonces vigente campeón de Holanda, MI Lodewijk Prins, podía darle cuatro puntos de ventaja en un match a diez partidas. ¡No es arrogancia ni nada!
3
«Cuando ustedes ven una posición, se preguntan qué puede suceder. Qué sucederá. Yo lo sé.» (Capablanca, en San Sebastián, 1911, a sus colegas, en trance de analizar). Tal vez no sea un disparate en sí, si creemos a Capablanca capaz de asumir su declaración. Pero una prepotencia de ese calibre no puede sino entrar en el libro de los despropósitos como arcano mayor. Otra cosa es definir el lugar que procede asignarle.
4
Viktor Korchnoi juega (con la intervención de un médium) contra Geza Maróczy una partida de la que incluso nos hace partícipes a través de la prensa. Por lo visto, la muerte no es impedimento para jugar al ajedrez. Korchnoi se descolgó en su día con esta declaración que, desde luego, constituyó toda una primicia. Incluso creo que acabó ganando. Tal vez porque tenía más energía (o porque a Maróczcy se le cortó la conexión con Internet). Tanto si se lo creía, como si pretendía tomarnos el pelo, está claro que la educación en la URSS dejaba mucho que desear.
5
Los duendes que operaban el Turco y sucesores. Jugadores de ajedrez profesionales (¡vicio inconfesable!) y, a la vez, patéticos fantasmas, que eran víctimas y cautivos de las marionetas que ellos mismos manipulaban.
6
Gary Kasparov, dando mandobles a diestro y siniestro para presentarse a las elecciones presidenciales de Rusia (¿abanderado de la nueva democracia? –lleva muchos años diciéndolo y pretendiendo serlo). El gesto no es un disparate en sí, puesto que le sobra inteligencia para medirse a los políticos, pero su grave error radica en que un portentoso ajedrecista como él no puede ignorar que ignora las leyes de la táctica y estrategia que rigen la política (¡el pragmatismo de la realidad!), de ahí que se haya empantanado en un lodazal, como le sucedió a Vargas Llosa en Perú. ¡Zapatero a tus zapatos!
7
«A Dios puedo darle peón y salida de ventaja» (atribuido a Wilhelm Steinitz, primer campeón del mundo). ¿Por qué no, si Dios no existe? Incluso podría darle dama y siete jugadas. Pero si existe, parece un disparate mayúsculo.
8
Sissa, por último, protagonista de la leyenda fundacional del juego rey, y un mago capaz de abarcar el universo con un grano de trigo. ¿A quién se le ocurre desafiar la soberbia de un rey? («vil como rey, como sombra de rey», decía Luis Cernuda). En el Milindapañha, el rey Menandro, en el siglo II aC, preguntó al sabio Nagasena: «Honorable Nagasena, ¿quéreis entrar en conversación conmigo?», y el sabio le respondió: «Si Vuestra Majestad quiere hablar conmigo como hablan los sabios entre sí, quiero; pero si quiere hablar conmigo como los reyes hablan entre sí, entonces no quiero.»
La temeridad de Sissa pudo haberle costado muy cara.
+
Manolo Ortas 16:17, junio 27, 2023
Hay otro par de ellas que me encantan:
-Alekhine en el aeropuerto «¿Pasaporte? Yo no necesito pasaporte, soy el Campeón del Mundo de Ajedrez».
-Kasparov: «En Ajedrez, mi palabra está muy cercana a la de Dios».
Jesus 18:18, septiembre 18, 2011
Agradezco sus grandes aportaciones e información que es de suma utilidad
p&r 19:57, septiembre 17, 2011
Excelente texto, redactado con ironía, lucidez y maestría. Una pequeña joya de gran valor.
Antoni Gude 20:55, septiembre 16, 2011
Parece, Jairo, que fue en el 67. Pero no en todas las partids jugó sus dos peones de torre dos casillas, ni me parece serio considerarlo una «técnica». Larsen era imaginativo y original, pero no excéntrico (le gustaban las buenas posiciones). En fin, creo que se trata de ese torneo. Por ‘marinera’ sólo conozco un bonito y delicado baile peruano.
Antonio Gude 20:31, septiembre 16, 2011
Larsen sorprendió a todo el mundo cuando en el torneo de Montecarlo avanzó sus dos peones de torre dos casillas. (No sé si fue en todas las partidas, pero lo vendieron como tal). Ya te diré el año. Desde luego, a fines de los sesenta. Polugaievsky escribió un bonito artículo al respecto. Saludos.
Anonymous 20:10, septiembre 16, 2011
Saludos,Antonio:
A propósito de disparates, no recuerdo dónde, leí que Bent Larsen jugó algunas partidas, avanzando una casilla, los dos peones de torre. Dicen que esa apertura se llama:Marinera», y que fue aceptada hasta 1990.¿Disparate o verdad?
Jairo