ajedrez, noviembre 24, 2011

¿Y si hablamos de BRONSTEIN? (1)

¿ Y si hablamos de BRONSTEIN?

1.
El prestigioso Oxford Companion to Chess, de David Hooper y Ken Whyld zanja, con poco más de una página (incluidas tres referencias a unas aportaciones suyas teóricas) a esta enorme figura del ajedrez. Unas páginas atrás, Botvinnik ocupa tres. ¿Agravios comparativos? Más bien, estrechez de miras.
Cierto que la figura de Botvinnik es inmensa, tanto en logros como por lo que significó para la evolución e historia del ajedrez. Pero Bronstein es otra cosa. Bronstein significó, no un paso al frente, sino dos o tres. Recordemos lo que dijo Petrosian, alguien tan opuesto a él en estilo y concepción del juego rey: «Los jóvenes (de entonces, claro) creen que el ajedrez moderno empezó con el ‘Informator’, pero nosotros sabemos que empezó con Bronstein.»
Esta declaración tiene un enorme valor, por cuanto procede de un campeón del mundo y porque ese «nosotros» sólo puede significar sus mejores colegas.

2.
He escrito no poco acerca de David Bronstein y mis trabajos sobre él pueden resumirse en los siguientes:
Traducción del libro El ajedrez de torneo. Zurich, 1953
Aproximación a David Bronstein, prólogo al libro citado
Conversaciones con Bronstein. RIA nº 66 (marzo 1993)
Rumbo a la galaxia Bronstein. RIA nº 77 (febrero 1994). Número extra de homenaje, con diversos artículos sobre DB, con motivo de su 70º aniversario. Aparece en primer plano en la portada, en una fotografía en blanco y negro.
Nuevas conversaciones con Bronstein. Jaque nº 443 (1999).
Voy a detenerme aquí sólo en algunos aspectos de su vida y su carrera, sin un orden cronológico, puras pinceladas, con alguna que otra reflexión sobre su vida y su obra.

3. EN EL NOMBRE DEL PADRE
En 1941, apenas comenzada la Segunda Guerra Mundial, un joven de diecisiete años, existencialmente confuso, se puso una mochila al hombro y se fue de su casa, emprendiendo un extraño viaje a ninguna parte, que le llevó a deambular por Georgia y Osetia del Norte. Participó en torneos locales, dio algunas simultáneas en hospitales y, a diario, jugaba en cantinas de soldados partidas de Blitz por céntimos, a fin de asegurarse la comida. En esencia, Bronstein se formó en todo ese derroche vital, en esa práctica intensiva de ajedrez. Cierto que a los nueve o diez años ya había recibido clases en el Palacio de Pioneros de Kiev, pero nada comparable a su experiencia práctica, en todo tipo de condiciones y ante todo tipo de rivales: llegó a dominar el tablero y sus secretos de esa forma.
¿Qué le llevó a irse de la casa familiar y emprender ese extraño deambular? Intuyo que la detención de su padre, años atrás (en 1937), como «enemigo del pueblo» debe haber tenido mucho que ver. Porque la detención de su padre le atormentó durante mucho tiempo. Muchos años después de que lo liberasen seguía atormentándolo.
El padre era gerente de un molino industrial y había incitado a los trabajadores a que reivindicasen sus derechos, como horas extras, etc. Fue liberado en 1944 y rehabilitado en 1955. Pero su situación, muy precaria, preocupaba a Bronstein, que por entonces era miembro de la sociedad deportiva Dinamo (es decir, del KGB). Como el presidente del Dinamo era un importante ministro, Bronstein se dirigió a él para pedirle ayuda. Vale la pena transcribir el diálogo (ya citado en ‘Nuevas conversaciones con Bronstein’):

–¿Qué puedo hacer por usted?
–Verá, hace unos cuantos años mi padre fue detenido…
–¿Dónde está ahora?
–En Moscú.
–¿En Moscú?
–Sí.
–¿Vivo?
–Sí.
–Entonces, ¿qué quiere usted de mí?

Ya sé que mis amigos y visitantes del blog quieren carnaza ajedrecística. Pero es importante conocer aspectos humanos para comprender a esta gran figura. Los tiempos no eran fáciles. En el caso del padre, puede ayudarnos un escrito de Haro Tecglen: «…ser hijo de preso dura toda la vida, no sólo es el horror de ver al padre en esa situación siendo alguien decente (…) sino en ti mismo, en la aniquilación de tus puntos de partida, en tu destino.»
(continuará)
+

6 comentarios

  1. Yes 16:58, noviembre 24, 2011

    Si, de los mejores que me he encontrado en mi vida, amo el ajedres! Congratulations!

  2. David Henríquez 13:43, noviembre 24, 2011

    Me uno a los anteriores, blog maravilloso

  3. Ronaldo 12:36, noviembre 24, 2011

    Después del comentario de Yoglis poco puedo decir yo, muy buena esta entrada Maestro Gude!!! Es usted un genio. Fabuloso poder ser partícipe de sus conocimientos.

    Un fuerte abrazo!

    Ronaldo (Aguas Calientes, México!)

  4. Yoglis Mitternacht 12:14, noviembre 24, 2011

    Antonio Gude, Antonio Gude, Antonio Gude… Por más que lo repito ese nombre me parece realmente corto para la excelente y magnífica figura ajedrecística que tengo en frente, el ajedrez no se trata sólo de los «Grandes Maestros» que nos deleitan con sus partidas, también se trata de LOS GRANDES MAESTROS, los que pueden enseñarnos mucho más que ver las partidas… tú eres un GRAN MAESTRO :)
    En realidad me encanta tu sensacional forma de redactar, de plantear temas, como seduces al lector para que quiera leer más y más… ¡Oye Antonio Maestros como tú son pocos! así que por favor sigue deleitándonos con tus maravillosas creaciones…

    Saludos desde Venezuela

  5. Carlos 12:06, noviembre 24, 2011

    Grande Bronstein!

  6. Quique 12:03, noviembre 24, 2011

    Me parece un gran artículo, tratas muchos temas, además del ajedrez y eso es bueno, ver el lado humano e histórico de este deporte, está claro que es importante conocer algo más que partidas, muchos nos han dejado un legado histórico impresionante, Gracias Maestro, siempre nos lo das todo!